



Doy gracias a Dios por sentirme útil y con ganas de hacer muchas actividades todavía y de manera especial compartir las cosas buenas con la familia que me quiere y que yo le amo. Pues nada tan valioso hay en la vida como amar y ser amado.
La familia es el valor que siempre debe cotizar a la alza porque ante este bien tan preciado no se debe anteponer ningún otro factor de la vida de cada día, ni en lo económico ni en lo social. La familia debe enriquecer los vínculos de unión cuando algo se cruza por medio. Todo miembro de una saga familiar por larga que sea, siempre guarda algún recuerdo de momentos buenos y esos no se borran sino que sirven de lazo para no romper la cuerda.
Mi valor más preciado, por orden, son mi esposa y mis hijas, luego siguen los hermanos.
Anselmo Fernández
1 comentario:
¡halaaaa! Ya te has hecho un experto en el blog!
un beso fuerte
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